La decepción de Valeria
Augusto cierra el taller a Valeria tras su negativa a acompañarlo
a la recepción del Pardo. Molesta, ella desmoralizada se lo cuenta a
Marina, una de sus mejores amigas, y se va a vivir a la casa de
Cercedilla y se plantea su futuro matrimonial.
Pelayo se camela a una periodista
Mientras, en el hostal se ha instalado Katherine, una periodista
americana que incordia a los demás clientes con el ruido que hace su
máquina de escribir. También
Pelayo
se interesa por el trabajo de esta misteriosa mujer y trata de que sus
artículos reflejen la “verdadera España” y no la que el Régimen quiere
vender.
Fascinadas con Katherine
A pesar de las quejas por el ruido que ocasiona Katherine, Dorita
está fascinada con ella e intenta que Manolita no la eche. "Es una
mujer muy interesante. Podemos aprender mucho de ella", comenta.
Dos Isidro, el jefe del barrio
Don Isidro cuenta a
Pelayo
lo bien que va la academia desde que él está al frente y lo mal que
está Aniceto últimamente. "¿Usted sabría lo que puede pasarlo?"
En defensa de su hermana
Curro irrumpe en los ultramarinos en busca de Antonio. “Mi
hermana es sagrada y está comprometida. Harías muy bien volviendo a tu
pueblo”, lo amenaza.
Antonio se mete en problemas
En defensa propia, el sobrino de Marina termina empujándolo: “El
que va a salir de esta tienda eres tú”, dice a Curro que jura que el
tema no se va a quedar así.
María se enfada con Antonio
A partir de ese momento, María debe dejar de limpiar la academia,
pues su padre se lo prohíbe, y echa la culpa a su enamorado: “Te has
pasado y ahora me tendrán encerrada en casa para siempre”.
Un favor personal
Diego pide a Telmo que “entretenga” a Lloveras, pues va a ir esa
noche a su chalé de la sierra a buscar las pruebas definitivas que lo
inculpen de la muerte de Rubén.
El reencuentro
Diego desconoce que Valeria está allí durmiendo. “¿Quién anda
ahí?”, sale ella con una pistola en la mano, que se dispara sin querer y
lo hiere. “¡Dios mío, Diego! Perdona, deja que te cure la herida”.
La pasión de Valeria y Diego
Por fortuna, Valeria logra evitar que Diego tenga que acudir al
hospital y la pareja acaba haciendo el amor. A la mañana siguiente,
aclaran sus sentimientos: ninguno ha dejado de amarse y su destino está y
debe permanecer unido.
Prohibido pisar la calle
Marce continúa en arresto domiciliario por su supuesta agresión a
Alfredo y no puede pisar El Asturiano, a pesar de que sufre un boicot
de suministros y repetidas visitas de unos gamberros, que sospecha están
mandados por el excamarero.
Leonor, arrestada
Finalmente,
Pelayo
se enfrenta a ellos y se produce una pelea, en la que interviene la
Policía y que concluye con la detención de Leonor y su padre, que ha
escapado de su encierro para ir a defenderla.
La separación ¿definitiva?
Héctor empieza a ser consciente de su ruptura dedice que el el
momento de encararse con Gabriel: “¿Qué pretendes ayudando a mi mujer?”.
Bonilla apoya a su amigo
La mediación de Bonilla hace que Héctor se calme un poco y no
llegue a más con Gabriel. Aunque desconoce el beso, Perea está muy
molesto simplemente por el acercamiento.
El acercamiento de Martín Angulo
En la recepción del Pardo, Méndez humilla a Martín Angulo en
presencia de Augusto, que se muestra impasible. Ofendido, el fiscal
busca una víctima fácil con la que desquitarse y se acerca a Pilar:
“Estás preciosa esta noche. Te sientan bien las fiestas. Pareces mayor”.
La chica se ilusiona ante las palabras que le dedica tan prestigioso
abogado.
María vuelve a trabajar
Antonio no soporta la idea de que María lo odie y trata de que
Dorita interceda por él ante el padre de la joven gitana. Rafael decide
aceptar que si hija, bajo su estricta supervisión, vuelva a trabajar de
limpiadora en el hostal.
La confesión de Aniceto
Don Isidro pretende ser el confesor de Aniceto, que lo rehúye:
“Me incomodan sus preguntas sobre mi familia y mi pasado”. No obstante,
la insistencia del cura hace que termine por claudicar y le revele su
gran secreto…
Diego resuelve sus dudas
El pasional encuentro con Valeria ha dejado turbado a Diego, pero
también le ha despejado algunas dudas: siempre ha amando a Valeria y
siempre la amará. No obstante, antes tiene que resolver algunos asuntos,
referidos a Lloveras.
Valeria piensa en su futuro
También Valeria se replantea su vida y su matrimonio. ¿Será capaz
de aceptar su fracaso matrimonial e iniciar una vida con Diego? De
momento, se siente encerrada en casa.
Gabriel, contra las cuerdas
En la recepción del Pardo, Méndez humilla a Martín Angulo en
presencia de Augusto, que se muestra impasible. Ofendido, el fiscal
busca una víctima fácil con la que desquitarse y se acerca a Pilar:
“Estás preciosa esta noche. Te sientan bien las fiestas. Pareces mayor”.
La chica se ilusiona ante las palabras que le dedica tan prestigioso
abogado.
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