Resumen de la semana...

En el hostal, Fernando se muestra cada vez más nervioso y tiene una pesadilla en la que mata a Valeriano. Al desepertase, confiesa a Daniel lo que le ocurre: “El Partido Comunista me busca. Estoy en peligro y no sé si mi amigo está conmigo o con ellos". El cura se queda impactado.
Por otro lado, Carmen tiene todo preparado para su viaje, pero antes debe reunirse con Ramiro. Para que Leo no se entere del encuentro, consigue que Marcelino lo lleve a ver un entrenamiento.
Mientras Carmen está en Le Ciel, Leo está en El Asturiano. En el prostíbulo se abalanza sobre la madame con intención de asfixiarla. Por suerte, un inocente comentario de Pelayo en El Asturiano delante del guardaespaldas le salvará la vida…
Por su parte, Vicente aprovecha su declaración ante Ricardo para sembrar sutiles dudas contra Mauro: “Se fue de casa tras una violenta pelea…”.
Alicia ya es una más en el barrio y cada día desayuna en el Asturiano. Un día, tomando un café, la nueva vecina se sincera con Manolita: “Álvaro y yo ya no somos pareja. Hace tiempo que vivimos separados”.
Luego, la abogada se dirige al Ministerio del Ejército para obtener información sobre Solís, su verdadero y único amor. Martín se entera de que la joven está investigando sobre su 'amigo' e irá pronto a hablar con ella.
Inés se queja del acoso policial al que están sometiendo a Mauro, y se cita con él en el despacho: “Te tienen acorralado, hay que preparar muy bien tu defensa. Necesito saber todo lo que hiciste a la hora de los asesinatos”.
Pero para evitar que la abogada se entere de su relación con la marquesa, el joven opta por sincerarse con Olazábal: “Estuve con esa mujer todo el día”. Sin embargo, cuando van al Ateneo a hablar con ella, la aristócrata dice no recordar “nada de nada”.
Fernando se marcha del hostal sin avisar. Días después, cuando Pelayo lo comenta con Marcelino, este admite que fue él quien le recomendó alejarse del barrio para no causar problemas. El veterano tabernero sale en defensa del fugitivo, incluso cuando se insinúa que antes de irse robó dinero a Tomás de su habitación.
Emilia intuye que algo malo está a punto de pasar y le insiste a Vicente en que tienen la obligación de apoyar a su sobrino. En plena discusión, el matrimonio conoce la noticia de que Mauro ha sido detenido con las joyas de sus padres en la mano.
En comisaría nadie parece querer escuchar su versión de los hechos de Mauro, e incluso es golpeado. Semiinconsciente en su celda, imagina que ha sido el primero de la promoción de Ingeniería. También evoca a su madre, que entre sueños le da la que puede ser la clave de su libertad.
Por otra parte, Guillermo manda una máquina de coser a Marina, gesto que ella malinterpreta hasta que Belén la convence de que podría ganarse la vida con ella.
En poco tiempo, Marina se da cuenta de que Belén tiene razón: “Pondré un anuncio como modista, pero la pagaré a plazos”, acepta. Pronto recibirá su primer encargo de costura.
Al día siguiente, la prensa da por resuelto el asesinato del matrimonio Jiménez: “Un aterrador crimen cometido por su propio hijo”. Martín está muy satisfecho con la resolución, mientras que Inés no soporta la injusticia.
Conde ha conseguido su objetivo: ya tiene un culpable y cree que con esto se resolverán sus problemas e, incluso, podría obtener un ascenso.
El fiscal no tarda en informar al bufete de Olazábal de los pormenores de la detención del joven Jiménez. Inés y Arturo se disponen a sacar al chico de la cárcel al precio que sea. "Casos más complicados hemos resuelto, pero tenemos que estar unidos".
La plaza está revolucionada por la detención. Pía comenta con su vecina Jiménez los pormenores de la detención y luego vuelve a hablar con Arturo para pedirle que haga lo posible por sacar de prisión a Mauro. "Emilia está destrozada. No puede creerlo".
Al encontrarse al matrimonio Luján, Braulio no tarda en recordar a Vicente que le debe "un gran favor". Emilia oye la conversación y pregunta a su marido de que se trata. "Un asunto sin importancia", encuentra como única respuesta.
Héctor se encuentra con su exsocio Bonilla, que le cuenta lo mal que están las cosas en comisaría desde que Vallejo se jubiló: “Ahora Conde impone su ley”. Aunque promete ayudar a su amigo, retrasa el asunto cuando su hijo Jesús enferma. “La familia es ahora mi prioridad”, se justifica.
Pero quienes más preocupados están por Mauro son Tomás, que se lamenta de no haber apoyado más a su amigo. Roberta intenta animarlo: "No te tortures, pronto estará libre".
Aunque todavía no ha confesado lo que realmente siente por Mauro, la implicación de Inés en el caso demuestra que no lo ve sólo como un amigo. Además, la chica hace lo necesario para cerciorarse de que no está siendo torturado en el calabozo.
Días después, Valeriano vuelve a ponerse en contacto con Daniel, pues supuestamente está localizando extras para una película entre la gente que vive en el Pozo del Tío Raimundo.
Carmen se despide de Arturo con lágrimas en los ojos: “Siempre he sabido que tu corazón pertenece a otra”. En realidad, el abogado ha estado toda la vida enamorado de la misma mujer: la madre de Inés.
La mente de la madame es un torbellino de sentimientos y sensaciones. Tiene que dejar atrás un negocio que le costó mucho sacar adelante y volver a emigrar y ahora sí que es consciente de que ha perdido al amor de su vida. 

Hola chicas, soy Laura, os dejo el resumen de esta semana...Un beso