miércoles, 27 de agosto de 2014

Daniel Freire: "En Amar es para siempre doy vida a un villano que se mueve por amor"

Por Cine54

Daniel Freire llegó desde Argentina para quedarse. El actor ha logrado hacerse un hueco en la televisión española y, tras pasar por series tan recordadas como Motivos personales, Ana y los siete o Doctor Mateo, ha fichado por el serial de sobremesa de Antena 3, Amar es para siempre, para dar vida a Aquilino. Charlamos con él para conocer cómo será su personaje y descubrir de primera mano alguno de los secretos de la tercera temporada de la mítica serie.

- Preséntanos a tu personaje, Aquilino
Aquilino es un hombre que hace más de veinte años que trabaja en Químicas Blasco, y se ha convertido en la mano derecha de Damián (Pedro Casablanc). Tras tanto tiempo juntos ha pasado a ser parte de la familia, y se ha enamorado de Juana (Ana Milán). Por amor ha aceptado todo lo que le ha pasado, y ha tenido que aprender a adaptarse a la vida, y más teniendo en cuenta que sus sentimientos no son correspondidos.
Mi personaje es ante todo una persona usada, de la que la gente se aprovecha para que lleve a cabo sus planes.

- ¿Qué le mueve para llevar a cabo sus acciones?
El amor, definitivamente. Puede que cometa actos bárbaros y peligrosos, y puede ser visto como uno de los villanos de Amar es para siempre, pero es un hombre enamorado que llega a hacer lo que sea por mantener sus sentimientos a flote.

- ¿Qué fue lo que te llevó a aceptar el papel de Aquilino?
Todavía estoy conociendo a Aquilino, no sé muy bien por donde va a tirar su historia, pero creo que le puedo llegar a querer mucho. Por un lado es un hombre pusilánime, pero por otro tiene muchos valores, es capaz de defender lo que siente y tiene mucho respeto por la familia que le ha abierto las puertas de su casa. Ese tipo de cosas me gustan mucho de las personas, por lo que creo que acabaré cogiendo mucho cariño a mi personaje.

- ¿Cómo cambia la vida de un actor cuando acepta una serie diaria?
De momento no me ha cambiado demasiado, ya que mi ritmo de rodaje es tranquilo, pero sí que es cierto que tienes que aprender una gran cantidad de texto. En las series diarias la presión es mayor, y el tiempo te come, por lo que tienes que ir muy rápido.
También cambian los guiones, en estas series parece que se repite mucho la información, porque tienes que pensar que el espectador no la puede ver constantemente, sino que lo mismo se pierde algún capítulo, así que tienes que reiterar los datos importantes, algo que es un poco dificultoso.

- ¿Es diferente aceptar un proyecto que empiece desde cero que una serie como Amar es para siempre, que lleva nueve años en antena?
Yo trabajo igual, tengo los mismos miedos al principio y suelo tener las mismas alegrías cuando los resultados son buenos. Quizá en un proyecto nuevo pones una ilusión diferente, porque hay que instalarla, pelear por encontrar un lugar y mantenerlo, tratar de conseguir que la serie guste, etc… Que te llamen para una serie como Amar es para siempre, que ya tiene su público, es un regalo, y el éxito o el fracaso en este caso no depende tanto de uno mismo sino del recorrido que la ficción esté teniendo.

- ¿Eras seguidor de la serie?
Sí, yo la veía porque tengo muchos amigos que trabajan aquí.

- Una de las cosas que suele atraer a los seguidores de Amar es para siempre es el regreso de personajes de temporadas anteriores, ¿te gustaría encontrarte con alguno de ellos?
Puede estar bien, pero siempre que aporten algo a la historia. En Amar es para siempre hay personajes que están aquí desde el comienzo, e incluso algunos que entraron más tarde pero continúan, por lo que pueden conocer a los antiguos que regresen, y está bien conocer qué ha pasado con algunos de esos personajes a lo largo de estos años.

- ¿Cómo ha sido el recibimiento del equipo de Amar es para siempre?
Fantástico. El equipo en general debe tener ya un mecanismo que haga fácil adaptar al recién llegado, ya que en la serie son habituales las incorporaciones.

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